Presenciar un ataque de ansiedad no sólo hace que la persona no esté en tranquilidad consigo misma, sino que genera un gasto de energía muy importante.
Por lo general un ataque de ansiedad se manifiesta por sentimientos de miedo, temor, inquietud y angustia y puede generar síntomas como:
– Sudor y escalofríos
– Tensión
– Palpitaciones
– Dolor en el pecho y/o abdomen
– Asfixia
– Taquicardia
– Despersonalización, o sensación de verse desde fuera
La ansiedad se suele asociar a situaciones de estrés fuertes, por lo que, si estás pasando por una, posiblemente te estés sintiendo identificado/a.
En esta nota te vamos a contar cómo controlar un ataque de ansiedad propio y cómo llegar a superarlo.
Procurá ir a una habitación o sector en el que te sientas en calma. Si tenés ropa apretada, una bufanda o pañuelo o exceso de ropa, lo ideal es que puedas despojarte de estas prendas para sentirte menos asfixiado y ponerte en una posición cómoda: como estar sentado o acostado pero sin hacer fuerza con nuestro cuerpo.
El primer paso que tenemos que dar es controlar la respiración. Para esto, seguir una meditación guiada o inhalar en seis segundos y exhalar en otros seis, ayudará a que se regule mejor el ritmo cardiaco y el cerebro lo reciba como un momento de calma.
Siguiendo con la respiración, un buen acompañamiento es cerrar los ojos e imaginarnos lugares lindos y agradables o sitios donde tengas un hermoso recuerdo que te traiga calma o felicidad, por ejemplo, la playa, las vacaciones con la familia, un paseo con tu mascota, o esa fiesta con amigos.
Otro consejo es distraer al cerebro, por ejemplo, podés agarrar en tus manos un cubo de hielo, comer ese caramelo que menos te gusta o saltar moviendo los brazos hacia arriba y abajo. Esto hará que el cerebro tenga que concentrarse en otra cosa y ponga de lado el pensamiento que te llevó hasta el ataque de ansiedad.
En caso de que luego de todos estos intentos, no puedas regular tu ritmo cardíaco, acudí a un médico para que te ayude a calmar.
Por último, aconsejamos que si estos episodios se repiten de manera constante, lo ideal es asistir a sesiones de terapia con especialistas en el tema.
En nuestro instituto contamos con grandes profesionales que pueden guiarte y acompañarte en este proceso.
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